Razono
sobre mí y me elevo
en
Divinidad, digo que todo es yo
y
no hay nada más que yo, todo lo que
veo
es verme, tan multilateral
y
polifacético es mi ser.
*
En
el desierto nació el comienzo
de
mi rostro. Pero reviví al Sexto día
de
La Creación. Así de complejo fue mi rostro,
antes
de converger en la perfección
padecí
muchas formas, y tal como
veo,
— soy.
*
Soy
el Principio de todo,
los
mundos se crean en mi conciencia.
Busco
a Dios, me busco en mí.
Dios
todopoderoso, omnividente, omnisciente,
futura
perfección de la intuición como la sobrerazón universal y mundial.
Busco
a Dios, busco mi rostro, ya tracé su silueta
y
quiero encarnar en mí.
La
razón me sirve de sendero hacia lo que
fue
trazado por la intuición.
*
Mi
rostro ríe y el temblor de la risa
torna
pesada a la sabiduría. Eso me diferencia de la naturaleza:
ella
no sonríe, carece de ése gesto, es perfecta.
“Yo” soy un comienzo grandioso. Rodearé acaso mi
rostro
con
el brillo de la sabiduría del universo.
Las
estrellas en mi rostro lucen y centellean
regenerando
el fuego de la sabiduría.
En
el mar de tus ojos las islas oscuras son herradas
como
eslabones en la memoria de la esclavitud.
Los
romperé, ya que la sabiduría es como una fuente de vida
dentro
de la isla oscura. Llevo la envoltura
que
conserva mi perfección en Dios.
Mis
ojos ven el mundo a través de eslabones que
son
la escalera de mi sabiduría.
A
través de la escalera del conocimiento conoceré lo que hay en mí
y
lo que arrojé a la vastedad de los caminos para conocerlo.
Pero
lo que conozco es el resultado de la sabiduría,
y
mi conocimiento es lo que está al pie de mi escalera.
*
Trata
de no repetirte, ni en el icono, ni en el cuadro,
ni
en la palabra. Me dice la voz del nuevo nacimiento,
si
algo en tu acto te recuerda un antiguo acto:
borra,
cállate, apaga rápido el fuego si es fuego,
para
que los faldones de tus pensamientos sean más ligeros
y
no se enmohezcan.
Para
escuchar el hálito de un día nuevo en el desierto
límpiate
el oído, borra los antiguos días, solo así
serás
más sensible y más blanco,
porque
lo oscuro yace sobre tus hábitos
y
con el soplo de la ola lo nuevo se trazará para ti.
Tu
pensamiento asumirá la forma, imprimirá el sello de tu rumbo.
*
La
razón constituye el primer rostro del hombre.
La
intuición es la formación vaga del segundo rostro
de
una nueva creación del futuro hombre. Pero en el fondo del tiempo
está
predeterminado un tercer comienzo,
eslabón
con el que se concluirá la estructura mundial,
nada
se le esconderá y millones de páginas
del
mundo serán leídas de una sola vez, ni un detalle escapará
de
la futura calavera de la sobresabiduría.
Lo
que es misterio ahora, será más claro que el sol.
Poemas traducidos para el curso "Poesía y Revolución", dictado por J. Galarza y N. Litvinova en abril/mayo del 2013, en la Fundación Centro Psicoanalítico Argentino.
¿Se pueden conocer cuáles son sus originales y dónde se encuentran?
ResponderEliminarMALÉVICH e imagino una de sus pinturas... Cómo encarará el poema, me digo. Qué gusto esta lectura!
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