«La muerte de un
artista no es una casualidad sino su
último acto creador, como el camino de su vida iluminado por los rayos […] ¿Por qué se asombran cuando los poetas predicen con perspicacia su propio
destino y saben cómo será su muerte? Si la muerte y el fin, son el más poderoso
elemento estructural del que dependen todas las corrientes de la vida. Aquí no hay
ningún determinismo, es necesario que se examine más bien como acto de la
voluntad».
excelente, como siempre..
ResponderEliminaruna vez más gracias,
gracias
por compartir.
un abrazo, magdalena